
El mercado cripto está lleno de optimismo tras la última corrección de Bitcoin, pero algunos analistas sostienen que la creciente narrativa de “comprar en la baja” podría ser en realidad una señal de advertencia más que una señal alcista.
Durante la última semana, Bitcoin cayó desde su máximo de mediados de agosto de $124,000 hasta apenas por debajo de $109,000. Normalmente, este tipo de correcciones genera cautela. Sin embargo, esta vez el sentimiento en redes sociales sugiere lo contrario: los traders parecen ansiosos por volver a entrar. Los datos de Santiment muestran que las menciones de “buy the dip” han alcanzado uno de los niveles más altos en meses.
Está muy claro.
Es temporada de comprar en la baja en $ETH ya que el ciclo alcista en $ETH recién comienza. pic.twitter.com/ZYCqekk24X
— Michaël van de Poppe (@CryptoMichNL) 30 de agosto de 2025
Históricamente, los suelos del mercado han lucido muy diferentes. En vez de compras entusiastas, tienden a formarse durante períodos de desesperación cuando el interés minorista desaparece. Santiment señaló que el entusiasmo en torno a una baja suele preceder otra caída, especialmente cuando se combina con una volatilidad elevada.
Mientras tanto, la capitalización total del mercado de criptomonedas se ha reducido a $3.79 trillones, perdiendo más del 6% en una sola semana. El Fear & Greed Index cayó brevemente en territorio de “miedo” antes de recuperarse, lo que resalta cuán frágil sigue siendo la confianza.
Aun así, no todos ven peligro. Algunos traders argumentan que la venta masiva está preparando el terreno para que las altcoins brillen. Analistas señalan que muchos tokens ahora están en territorio extremadamente sobrevendido, condiciones que no se veían desde antes de los grandes rallies de 2017 y 2021. El Altcoin Season Index de CoinMarketCap ya se inclinó a su favor, lo que sugiere que el capital pronto podría rotar de Bitcoin hacia el mercado más amplio.
Alimenta aún más esa especulación la expectativa de un recorte de tasas por parte de la Reserva Federal en septiembre. Con la inflación aún persistente y el crecimiento desacelerándose, los mercados ahora ven un 86% de probabilidad de flexibilización, según la herramienta FedWatch de CME. Cualquier movimiento en ese sentido podría reavivar el apetito por el riesgo y proporcionar un fuerte viento de cola para las criptomonedas.
Por ahora, sin embargo, Bitcoin se encuentra en una encrucijada. La multitud está confiada, las ballenas son cautelosas y la historia muestra que usualmente uno de los dos lados se equivoca. Las próximas semanas podrían decidir si esta baja se convierte en la plataforma de lanzamiento para la altseason — o en el inicio de una caída más profunda.